El otro día estaba yo caminando por la calle
y me encontré a una niña de unos cinco años.
Estaba apoyada en la puerta de un coche negro
y no paraba de gritar: '¡Papá!'
Me agaché ante ella, le di la mano,
ofrecí mi mejor sonrisa y le dije:
'¿Cómo te llamas preciosa? ¿Estás perdida?'
Ella respondió: 'No'.
Dijo: 'Vengo de otro planeta
y, como veo que te has agachado ante mí,
voy a ser yo quien te ayude hoy a ti'.
Me preguntó: '¿Cuál es tu problema Delafé?'.
Me quedé como paralizado.
¿Era aquello una revelación?
¿Habían llegado los aliens a El Masnou?
Intenté ser franco y dije, sí, dije:
'Cada vez que creo que lo tengo, vuelvo a derrapar.
Cada vez que creo que lo tengo, vuelvo a derrapar'.
Se puso a pensar, mirando al cielo unos segundos y dijo:
'Es normal que derrapes, Delafé.
¿Acaso todas las olas rompen igual en el mar?
¿Acaso hay en el cielo alguna nube
que no sucumbe al viento irregular?
¿Acaso existe una estrella que no deje de brillar?'.
Dijo: 'Cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar'.
Acercó su boca a mi oreja y dijo:
'Te diré una palabra mágica para cuando te encuentres mal;
en mi idioma significa -dale gas y no mires pa" trás-'.
Tardó unos segundos en hablar,
se notaba en el aire que algo de lo más trascendente
iba a pasar porque paró el viento de repente,
hubo un eclipse solar,
los perros empezaron a maullar.
Al final susurró a mi oído... dijo la marciana: 'Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial'.
Empezaron a bajar ovnis del cielo
y yo ya no entendía nada de nada,
porque la situación sobrepasaba a lo galáctico-sideral.
Entonces se unió todo el pueblo, El Masnou entero,
aliens y humanos nos pusimos a cantar
aquella palabra tan espacial...
'Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
(todos)
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial'.
Y de repente, de repente sonó jazz,
sonó jazz... y ya está.
y me encontré a una niña de unos cinco años.
Estaba apoyada en la puerta de un coche negro
y no paraba de gritar: '¡Papá!'
Me agaché ante ella, le di la mano,
ofrecí mi mejor sonrisa y le dije:
'¿Cómo te llamas preciosa? ¿Estás perdida?'
Ella respondió: 'No'.
Dijo: 'Vengo de otro planeta
y, como veo que te has agachado ante mí,
voy a ser yo quien te ayude hoy a ti'.
Me preguntó: '¿Cuál es tu problema Delafé?'.
Me quedé como paralizado.
¿Era aquello una revelación?
¿Habían llegado los aliens a El Masnou?
Intenté ser franco y dije, sí, dije:
'Cada vez que creo que lo tengo, vuelvo a derrapar.
Cada vez que creo que lo tengo, vuelvo a derrapar'.
Se puso a pensar, mirando al cielo unos segundos y dijo:
'Es normal que derrapes, Delafé.
¿Acaso todas las olas rompen igual en el mar?
¿Acaso hay en el cielo alguna nube
que no sucumbe al viento irregular?
¿Acaso existe una estrella que no deje de brillar?'.
Dijo: 'Cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar,
cada vez que creas que lo tienes vas a derrapar'.
Acercó su boca a mi oreja y dijo:
'Te diré una palabra mágica para cuando te encuentres mal;
en mi idioma significa -dale gas y no mires pa" trás-'.
Tardó unos segundos en hablar,
se notaba en el aire que algo de lo más trascendente
iba a pasar porque paró el viento de repente,
hubo un eclipse solar,
los perros empezaron a maullar.
Al final susurró a mi oído... dijo la marciana: 'Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial'.
Empezaron a bajar ovnis del cielo
y yo ya no entendía nada de nada,
porque la situación sobrepasaba a lo galáctico-sideral.
Entonces se unió todo el pueblo, El Masnou entero,
aliens y humanos nos pusimos a cantar
aquella palabra tan espacial...
'Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
(todos)
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial,
Copa-Tropa-Disco-Keshimo-Naste-Terfi-Master-Dial'.
Y de repente, de repente sonó jazz,
sonó jazz... y ya está.